Este es el lugar
para:
Artículos,
comentarios y colaboraciones en general para compartir con los
compañeros.
Envíanos las tuyas.
olivetianos@olivetianos.es
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Mi vida en una
empresa llamada Olivetti.
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José Luis Varas
Contiene las reflexiones de José Luis Varas sobre su vida en
Olivetti. Será una visión personal y por lo tanto parcial.
Sería
bueno que otras personas completen su visión. Es muy sencillo:
se entra en la página, se escriben los comentarios y se mandan.
Esa es
la intención de la sección de Varas, provocar y hacer posible un
recuerdo más compartido y por lo tanto más real.
José Luis Varas
es autor de
"Parejas" antología de cuentos que se
centra en el tema de la pareja en su más amplio
espectro y en los múltiples conflictos, encuentros y
desencuentros, esperanzas y desesperanzas, a que
puede dar lugar. Leer
más
-
Capitulo
1º
Este año he empezado mi tercera vida. La segunda fue mi
vida en Olivetti, al final del año pasado se acabó.
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-
Capitulo
2º
Mi primer encargo en Olivetti fue preparar un seminario
para sensibilizar a los mandos del STAC.
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Capitulo
3º
Estoy
acabando mis vacaciones. Todavía tengo la inercia de
diferenciar mi vida “normal”, de la que llamo
vacacional.
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Capítulo
4º
Todos
deberíamos hacer un resumen de nuestros recuerdos
referidos a nuestros jefes. Son figuras clave en nuestro
historial empresarial.
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Capítulo
5º
Romano Gabriele fue Director General de Olivetti en
España durante unos años de gran vitalidad de nuestra
empresa.
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Capítulo
6º
El evento: punto de reencuentro.
El próximo sábado nos vamos
a reunir con objeto de celebrar el centenario de la
fundación de Olivetti.
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Recuerdos de un Olivetiano desmemoriado.
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José Manuel Aguirre
Introducción
Desde que dejé la empresa,
cada año me asaltaba una o dos veces la tentación de
escribir unas notas en las que plasmar mis recuerdos de
muchas de las personas que en ella o a través ella he
conocido; de tantas cosas allí ocurridas de las que he sido
testigo de primera mano y, a veces, protagonista; de tantas
lecciones recibidas y de los errores cometidos, no menos
numerosos. En el ámbito profesional y en el plano puramente
humano. Hasta ahora vencía esa tentación con facilidad. No
me costaba apenas nada convencerme de que hacerlo no tenía
utilidad ni interés para nadie; de que no sería capaz (esto
posiblemente siga siendo cierto); de que mi memoria (cada
año más infiel) no daría para nada más que para unos pocos
folios sin sentido y de que, en el mejor de los casos, una
vez escritos nunca se iban a publicar.
Pero este año las cosas han
cambiado. Celebramos el Centenario de la fundación de
Olivetti. Con este motivo, los olivettianos españoles hemos
abierto una sección en la Web. José Luis Varas me explicó
que quería publicar en ella sus recuerdos empresariales y
tuvo la amabilidad de mandarme en primicia su primera
entrega antes de su aparición en la Web. Ello me ha servido
de estímulo para ponerme a escribir. Creo que una visión
complementaria añadirá un punto de vista distinto para
describir, aunque sea muy parcialmente, una realidad tan
compleja como ha sido una empresa como la nuestra. Cuando
menos daremos una imagen bidimensional de ella. Si se anima
un tercero o una tercera, la imagen adquirirá volumen: la
veremos en 3D. Espero que seamos muchos los que hagamos
partícipes a los demás de nuestros recuerdos, incluso, si
nos atrevemos a especular, de lo que pudo haber sido y no
fue.
Ha habido mucha vida y muy
rica dentro del cosmos Olivetti. Yo creía que me iba a
resultar muy difícil empezar y, sobre todo, dar continuidad
al relato. Por ahora, no es así. Paradójicamente, los
recuerdos pueden más que mi mala memoria. Se agolpan en mi
mente y pugnan por ser los primeros en pasar de un lugar
recóndito y minúsculo a la inmensidad del universo digital.
Me cuesta mucho – por no decir que me resulta imposible –
poner orden. Veremos qué sale.
Bienvenidos sean vuestros
comentarios. Sed benevolentes con mi intención e
intolerantes con esta infiel memoria mía, con sus errores e
inexactitudes. Que los habrá.
José Manuel Aguirre
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La
foto de la promoción del 63.
Los que me conocen saben de mi afición a la fotografía.
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Cómo
llegué a trabajar en Olivetti.
Como sabían que me oriento muy mal, me lo habían
advertido.
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Nuestro
periodo de primera formación.
Como sabéis, cuando Olivetti estableció en Barcelona su
primera fábrica el año 1929.
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La
formación comercial.
Durante aquellos
calurosos días de inicio del verano.
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A
trabajar.
Se acabaron las vacaciones.
Regresamos con una mezcla de curiosidad y preocupación.
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Aquellas
estadísticas de COMESA.
Antes de empezar a escribir
esta entrega, me he advertido severamente.
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Cincuenta
favores.
A mediados de aquel octubre
de 1963.
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Dos
activos muy sólidos.
Desde la construcción y
puesta en marcha de la nueva fábrica de Barcelona, en
1942.
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Del
patriarca y el hechicero.
En un capítulo anterior me
he referido al dott. Vernetti como al patriarca y jefe
de la tribu de los “comesos” y al dott. Sinigaglia, como
a su brujo y hechicero.
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Nos
trasladamos a la Ronda.
A primeros de junio de 1964, un
año después de mi ingreso en la empresa, nos trasladamos
al nuevo edificio de la Ronda de la Universidad.
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-
Un
nuevo departamento central.
Cuando nos instalamos en la
nueva sede, no sólo estrenamos sus dependencias.
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-
Un
cuerpo de élite.
Debo recurrir a la
terminología militar para referirme, en esta
recopilación de recuerdos, a una unidad comercial
singular.
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Un
giro di boa.
Cuando consigo extraer del pozo profundo de mi
desmemoria algo digno de ser contado, para hacerlo
quisiera tener algo de la gracia de una Elvira Lindo.
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Llega
Riccardo Berla.
La noticia se confirmó. En
el primer semestre de 1965 vino a Barcelona el italiano
que esperábamos.
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Aquella
Italia.
El 8 de enero de 1966,
domingo, a las 16:10 horas, despegó puntualmente del
aeropuerto de Barcelona el vuelo AZ 359 de Alitalia con
destino a Milán.
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-
Giovanni
A. Bocca, mi maestro y mi amigo.
Aquel 9 de
enero, en el desayuno, saboreé por primera vez en mi
vida un capuccino.
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-
Mis
amigos de Ivrea.
A los pocos días, iba a
realizar mi primer viaje a Ivrea, desde Milán.
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-
Otros
recuerdos de aquel primer viaje.
Antes de ir a Italia, el dott. Vernetti me dijo que
aprovechara cualquier fin de semana para conocer
Venecia.
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La
Dirección de Estudios Económicos.
A mi regreso a Barcelona,
informé al dott. Vernetti y al ing. Berla de mis
actividades en Italia.
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El
único tiempo no es el presente.
En esta vigésima entrega se impone un tiempo de
reflexión.
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Mi
amigo Carlos.
Es el mejor contador de
historias que he conocido.
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El
cupo.
Con esta palabra se
designó, durante algún tiempo, a los objetivos anuales
de venta para la empresa.
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-
Miscelánea
de recuerdos.
Muchos de los compañeros de
entonces no podremos olvidar la fecha del 4 de noviembre
de 1966.
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Del
cupo al programa operativo.
Cuando un
componente de una organización sabe con claridad lo que
ésta espera de él tarda menos tiempo y emplea menos
esfuerzo y menos dinero en conseguirlo.
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Nuevas
sucursales y delegaciones.
En uno de los capítulos anteriores había prometido
ilustrar la evolución de la organización comercial.
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El
censo del parque mecanográfico español (I). Sus
objetivos.
El año 1968 fue un año cargado de
grandes acontecimientos internacionales.
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El
censo del parque mecanográfico español (II).
Su preparación.
Una buena preparación del trabajo era determinante para
el éxito de la operación.
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-
El
censo del parque mecanográfico español (III)
Los resultados (primera parte).
No recuerdo exactamente
cuándo dispusimos de los primeros resultados ni de los
resultados completos.
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-
El
censo del parque mecanográfico español (IV)
Los resultados (segunda parte).
Me doy
cuenta que las entregas relativas al censo están
resultando algo duras.
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La
Administración.
Cuando ingresamos en
Olivetti, durante aquel largo período de formación,
nadie se preocupó de explicarnos cómo se administraban
HOSA y COMESA.
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Después
del censo.
Después del censo no hubo
tregua.
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Madrid,
de Sucursal a Casa Central.
Las sucursales solían ser
los núcleos de nuestra organización comercial y de
servicios en los que se concentraba más energía, más
imaginación y más actividad.
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Récord
Guiness: el puzzle más grande del mundo.
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José Manuel Aguirre
PUZZLE 93
En el diario EL PAÍS, a poco
de su aparición, se creó un espacio publicitario de unos 98
X 78 mm en la parte inferior de la primera página. Desde el
primer momento , Olivetti lo contrató. Hay quien asegura que
fue Ceballos el que propuso al periódico la creación del
espacio. No lo puedo mantener con seguridad. El caso es que
lo usamos profusamente. Le llamábamos "la mancheta". Los
anuncios tenían que ser de formato muy sucinto, pero
producían un gran impacto en la primera página del periódico
de mayor difusión en España.
Unos dos años después de los
Juegos Olímpicos de Barcelona, a EL PAÍS se le ocurrió
construir el mayor puzzle jamás realizado hasta entonces.
Eligió como escenario el Estadio de Montjuic. Naturalmente
necesitaban un patrocinador de aquel evento. Pensaron en
Olivetti, el más asiduo anunciante en su primera página.
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Archivos
sonoros de Hispano Olivetti.
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Queridos colegas.
Abrimos aquí una sección
dedicada a los registros sonoros de
Hispano
Olivetti.
Os invitamos a colaborar
con vuestros registros y grabaciones de la época con la
intención de incluirlas en la web para difusión general.
Para soporte técnico y consultas puedes
utilizar el correo de los Olivetianos:
olivetti100@olivetianos.es
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Entrevista
al Sr. Peyretti, Consejero Director de Hispano Olivetti.
Grabación del Año
1959
Leer y
escuchar
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El
Sr. Lobo y el Sr. Cordero.
En 1971 Olivetti decidió
eliminar las limpiezas periódicas de las máquinas de
escribir.
Leer y
escuchar
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Espinás
y su amiga la Olivetti.
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José Manuel Aguirre
Alguien me ha hecho llegar un
recorte de prensa. Contiene el texto que el periodista Josep
Pernau publicó hace algunos días en su sección fija de EL
PERIÓDICO de Catalunya. Llevaba por título el mismo que
encabeza esta nota. Creo que la fidelidad del maestro
Espinàs a su vieja Olivetti bien merece que lo
reproduzcamos.
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STAC:
de la Lexicon 80 hacia la Auditronic.
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Enrique Puig Climent
Queridos y admirados, por la
iniciativa y su desarrollo, colegas.
Me ha picado la lectura de los
documentados, emotivos y refrescantes artículos de JL Varas
y JM Aguirre y se me ocurre proponeros mi participación con
la colaboración que os adjunto que se inicia con el STAC del
62 que veo que salvo JL Varas a partir del 74 no lo
menciona.
Fue a partir del 62 que se
empezaron a transformar los talleres y cuando se pusieron
los cimientos de un STAC que con la incorporación de muchos
de los que estáis ahora en c/ Santander se transformó en una
de las partes fundamentales de Olivetti no solo superando el
calificativo de "taller" (conjunto de honestos limpiadores y
reparadores de máquinas de escribir) que ocupaba y
preocupaba poco a los comerciales sino creando un
Departamento fuertemente especializado que con el tiempo se
convirtió en imprescindible y decisorio para la excelsa,
divina y superior actividad comercial.
Como veréis escribo en plan
anecdótico y no sé si eso puede interesar.
Ya diréis.
Un abrazo.
Enrique Puig
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Recuerdos
de Mati.
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Matilde Peña
Hola a todos.
He leído todos los comentarios que se han ido publicando con
referencia a las colaboraciones de distintas personas, y
todos, supongo que habrán querido expresas sus vivencias o
sus vidas como dice Varas, en esta casa.
El divide su vida en tres vidas, la anterior a OLIVETTI, su
vida en OLIVETTI y la actual fuera ya de la empresa. Yo
quisiera expresar los recuerdos de los que tanto la primera
parte, como la segunda o casi toda, han sido OLIVETTI.
Me refiero a los que nuestros padres ya trabajaban en
OLIVETTI, o como es mi caso, que no solo mi padre sino
también mi tío, un hermano de mi abuela - en Rápida - y
varios primos de mi padre hasta un total de siete miembros
contándome a mi, hemos trabajado en OLIVETTI.
Mis recuerdos van desde la recogida de los regalos del día
de Reyes en la fábrica, con la correspondiente foto en el
campo de deportes o piscina, los baños en verano en la
piscina y merienda en las mesas debajo de los árboles del
patio esperando que mi padre acabara su turno de trabajo,
los reconocimientos médicos en la guardería para poder ir de
colonias de verano a la maravillosa casa de Teià, hasta el
olor de disolvente impregnada en la ropa de mi padre al
volver a casa.
Con esto quiero hacer un pequeño homenaje a tantos y tantos
trabajadores que han pasado por fábrica, que han sido una
parte importantísima para que todos pudieran vender,
reparar, facturar, y tantas y distintas tareas que se han
desarrollado durante estos 100 años en esta casa, a la que
muchos - incluso sin haber trabajado nunca en ella - siguen
recordando la Hispano Olivetti.
Un abrazo
Matilde Peña |
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Cuarenta
y dos años.
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Francisco Pipó Rivera
Queridos colegas.
Siempre es bueno oír la voz o
la letra de un compañero.
Aquí me tienes como siempre,
como un amigo cercano, aunque lejano en el tiempo. Os mando
un articulillo y fotos con la ilusión de que al publicarlo
siempre habrán muchos que por olvidado, aprieten su memoria
y salga a la luz aquel charnego andaluz que mas, se le oía
que se le veía.
Un abrazo.
Francisco Pipó Rivera
..........................................
Compañeros.
Hoy, y por última vez me dirijo a vosotros, por algo que
considero anecdóticamente necesario. Solo, anecdóticamente.
He recibido alguna crítica entre mis amigos más cercanos,
argumentando dos detalles.
El primero, dudando que tanta mención entre mis
artículos sobre “nuestra gran madre empresa”, no asisto a la
reunión que nos convoca este centenario. Desde el principio,
he aludido que no me es posible por razones familiares que
son primordiales y así me lo impiden. Mi colaboración con
este evento, literariamente se ha manifestado en demasía,
quizá escandalosa. Agradezco a la única contestación que he
recibido y por parte del Sr. Aguirre, que valoro en su
medida de acercamiento singular, y sintiendo en no darle mas
datos sobre su labor de estudio. Y a la oferta de amistad y
atención, de nuestro coordinador informático, Don Juan.
En segundo lugar, mi mención por la muerte de un
compañero nuestro y de todos, durante estos días de
convocatoria. Este detalle ha sido por mi parte bien pensado
y correctamente decidido en no dar su nombre, dado que es su
propia familia (conocedora de esta Web), quien únicamente
seria la autorizada a dar la noticia. Por todo ello, los mas
allegados hemos sido los únicos en estar presente en tan
triste momento y dado que son varios, por esta causa,
ausentes en estos días, con el y por ellos, mi pesar a sus
familias.
Finalmente, repito mi gran cercanía ante esta acertada
ceremonia de recuerdo, para nuestra marca OLIVETTI.
Mis disculpas por atrevimientos, si los hubo, y alegría en
tan gran encuentro. Gracias.
Francisco Pipó Rivera
Barcelona, 12 de octubre de 2008 |
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Divisumma
18.
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Jordi Mestre
Queridos colegas.
Las vacaciones son una buena
oportunidad para hacer un poco de turismo y encontrarte con
evocadoras sorpresas como la que adjunto.
Se trata de la página 293 del
libro denominado "MoMA Highlights", que recoge a modo de
catálogo, 350 obras del Museum of Modern Art New York. En
ella se hace glosa de la calculadora impresora electrónica
Divisumma 18, de OLIVETTI.
El libro lo obtuve en ocasión de
una reciente visita turística al museo.
Un abrazo.
Jordi Mestre
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Recuerdos
de un Olivetiano.
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Ezequiel Cabado
Queridos colegas.
Al leer las diversas
colaboraciones de mis compañeros de fatiga en Olivetti, me
he animado a escribir cuatro líneas (es un decir) que me
permiten rememorar y, a la vez dar a conocer a los muchos
amigos, mi pequeña pero larga historia en Olivetti con
anécdotas y situaciones extraordinarias.
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Viaje
inolvidable a Ivrea.
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Antonio Ibars Roca
Queridos colegas.
Me gustaría animaros a todos a
enviar vuestras experiencias olivetianas a este lugar de la
misma manera que los que ya las han enviado me han animado a
mi. Y no os preocupéis por el contenido y la calidad de
vuestros escritos puesto que estoy convencido que cualquiera
de vosotros lo hará mucho mejor que yo.
Si no me creéis, seguid
leyendo y podréis comprobarlo, así es que ánimo y adelante
con vuestros relatos.
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Historia
de mis 45 años en Olivetti.
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Juan Clapés Torres
Queridos colegas.
¡Felicidades por el centenario
de nuestra querida Olivetti!.
Yo empecé en octubre de 1963
con solo 16 años a desmontar y montar las famosas M 40,
LEXICON 80, la antigua ESTUDIO 46, PLUMA 22, ESTUDIO 44,
RESTISUMA 15, RESTISUMA 20 y DVS 14 en el taller del
concesionario Francisco Salas de Palma de Mallorca. Así
estuve 3 meses aprendiendo el oficio, que en mi pequeña isla
de Ibiza no existía y tenían que mandar las máquinas a
reparar a Mallorca.
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Velada
en el Restaurante “ALFREDO” de Roma.
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Carlos Tutusaus
Queridos colegas.
En el año 1.960 fui por primera vez a Roma, pero fue a
partir de 1.970, cuando, habiendo sido nombrado Director de
la Sucursal de Entidades Oficiales - que más adelante llegó
a ser División Estado Autonomías y Bancos -, el contenido de
mi trabajo me llevó con relativa frecuencia a la “Ciudad
Eterna”.
Por este motivo y como sentido recuerdo a nuestro compañero
José Llanos (d.e.p.), relato a continuación una anécdota
ocurrida en un viaje que hicimos juntos a Roma.
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Unos
pocos recuerdos de un aprendiz Olivetiano.
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Xavier Sáenz
de Buruaga
Queridos colegas.
Unos pocos recuerdos de un aprendiz
Olivetiano.
Situación: Ronda Universidad nº 18 de
Barcelona. Despacho del Taller Central en Barcelona a
primeros de septiembre de hace muchos años.
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Relatos
de un luchador desmemoriado con suerte.
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Jordi Calvet
Queridos colegas.
Por fin he podido vencer mi
pereza y paso a dejar plasmadas algunas de mis vivencias en
Olivetti , a través de lo que yo quiero llamar "Relatos de
un luchador desmemoriado con suerte."
Todo empieza con mi ingreso en
Olivetti en Junio de 1968.
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Relatos
de un luchador desmemoriado con suerte.
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Conozca
España y ...con Olivetti.
Un
nuevo ciclo empezaba para mi en Olivetti.
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La
Rioja. No solo de pan vive el hombre.
Logroño era
una de las cuatro concesiones que yo debía gestionar.
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Siguen
mis viajes.
Esta vez y siguiendo indicaciones de mi Jefe, Sr. Cignetti, en una semana visité las dos concesiones que
aun no conocía: Soria y Huesca.
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Mi
estancia en Cádiz.
Recuerdo perfectamente mi regreso a Barcelona, después
del Simo.
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Un
año inolvidable.
De inolvidable
puede calificarse el año que mi familia y yo pasamos en
Cádiz.
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De
Cádiz a Madrid.
Escribo estas líneas, poco
después del gran momento que para mi fue el Evento
Olivetti 100. Ah, y os sigo queriendo. En Noviembre de
1970 me trasladé de Cádiz a Madrid.
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Carta
de adhesión.
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Antonio M. Torres
Queridos amigos.
En primer
lugar quiero daros la enhorabuena por la iniciativa que
habéis tenido de organizar el encuentro “Olivetti100”. Me
parece una buena idea.
Somos muchos los que hemos
desarrollado nuestra vida profesional ligada a Olivetti,
nuestra actividad e incluso nuestro patrimonio han estado
ligados a Olivetti. Hemos experimentado muchas emociones y
hemos desarrollado muy buenas amistades y ahora tenemos
recuerdos entrañables. Tener la oportunidad de reencontrar a
muchas personas que no hemos visto durante años es una buena
idea.
Lamentablemente el dieciocho
de octubre tengo una boda a la que no puedo faltar, sin
embargo quiero estar presente en la reunión y adherirme al
acto. Para ello os dirijo esta carta de adhesión, os hago
llegar unos obsequios para repartir entre los asistentes y
espero enviaros en los próximos días un escrito con una
pequeña parte de mis muchos recuerdos. Mi única duda es que
no voy a poder citar las muchas personas que recuerdo con
cariño, espero que los que no llego a citar entiendan que
sólo es una cuestión de espacio y que están todos en mi
corazón.
Un cordial saludo,
Antonio M.Torres
Zaragoza, a 2 de Octubre de
2008.
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Extraña
fidelidad.
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Juan García Dolz
Queridos colegas.
Llamó de nuevo al mecánico de Olivetti,
seguía sin funcionar. Así comienza esta colaboración que
habría querido presentar en el concurso de microrrelatos pero no me
ha sido posible reducirla suficientemente en extensión ya que tratándose una historia
peculiar, sorprenderte y rigurosamente cierta, ha
requerido ser desarrollada con los detalles literarios y
gráficos suficientes para que el
lector comprenda fácilmente el alcance y variedad de una extraña fidelidad que
ha generado
Olivetti.
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Relato.
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Antonio
M. Torres
Queridos amigos.
He leído las colaboraciones
que se han publicado en la web con el placer que despiertan
los buenos recuerdos y he sentido la necesidad de imitar a
mis compañeros, además no podré estar en la reunión del día
18, así que me he decidido a enviaros por escrito algunas
vivencias que estos días me han venido a la mente.
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Las
peculiaridades estructurales de Olivetti.
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Juan
Maiques
Hasta ahora, las diversas
colaboraciones publicadas en nuestra web tenían como objeto
la narración de las experiencias, todas ellas interesantes,
de algunos de nuestros compañeros a lo largo de su vida
profesional en Olivetti. Desde quien se refiere a un
episodio anecdótico de su vida hasta los que, mediante una
serie de artículos, nos cuentan no sólo su propia
trayectoria profesional, sino de algún modo el devenir de la
empresa en una época concreta, aunque utilizándola casi como
obligado telón de fondo de su narración. En todos estos
relatos, el protagonismo se centra, casi siempre, en la
peripecia personal y en el recuerdo de compañeros y
acontecimientos relacionados con ella. La empresa es,
naturalmente, referencia necesaria, pero con un protagonismo
relativo.
Nuestro compañero Juan Maiques
nos aporta en su colaboración una visión global de la
empresa y un análisis de sus elementos diferenciadores. Juan
eleva su punto de vista y, desde una perspectiva alejada de
la anécdota personal y contemplando a la empresa como un
sistema complejo, analiza y sintetiza las que él cree
características peculiares de Olivetti.
El artículo de Juan Maiques
abre nuevas posibilidades al recuerdo, a la reflexión y a
nuevas colaboraciones. Se nos plantea un amplio campo de
análisis. ¿Cómo era la Olivetti que conocimos? ¿Cómo
evolucionó, si es que lo hizo? ¿Cuáles eran los elementos
que la diferenciaban estratégicamente de sus competidores?
¿Qué causas la abocaron a su desaparición? Y tantas otras
preguntas. Y, en todo caso, una sola, si queréis ¿estáis de
acuerdo con el diagnóstico de nuestro compañero Juan Maiques?
Invitamos, pues, a todos
nuestros compañeros a manifestar sus opiniones sobre tan
interesente cuestión.
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Recuerdos
de un veterano.
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Juan
Luis de Llanes.
Queridos amigos.
No tengo conexión a Internet,
pero mi hija María Jesús me imprime algunos de los artículos
que publicáis en la Web de Olivetianos y me comenta muchos
de los otros. Cuando me llamó Paco Escalante para anunciarme
la convocatoria de la fiesta del Centenario de Olivetti,
decidí enseguida que tenía que estar presente en ella.
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Las fotos de María Teresa Subils.
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Queridos amigos.
María Teresa Subils nos ha
mandado unas fotos de indudable interés para su publicación
en nuestra Web. Algunos de los compañeros y compañeras que
aparecen en ellas quizá las tenían olvidadas o extraviadas.
Ahora, al contemplarlas de nuevo, después de algún tiempo,
sentirán reavivarse determinados recuerdos de sus años de
juventud, de las circunstancias especiales de los varios
momentos en que fueron tomadas, de las inquietudes,
problemas e ilusiones vividos en aquellos tiempos y de
tantas cosas más que este improvisado cronista no llega ni
siquiera a intuir.
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Jordi Morató, todo un veterano.
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Queridos amigos.
La fiesta del pasado 18 de
octubre, en la que conmemoramos el Centenario de la
fundación de Olivetti, estuvo llena de gratas sorpresas y
emocionantes encuentros. Sólo en los días previos a la
celebración se publicó en nuestra Web la lista de los
compañeros que habían comprometido su asistencia.
Naturalmente, los miembros del comité organizador sabíamos
de la progresión de las inscripciones a medida que se
producían. Cada nuevo nombre era un motivo añadido de
alegría y una expectativa más. Ésta era tanto mayor cuanto
más tiempo hacía que no teníamos noticia del recién
inscrito. Para mí, tal fue el caso de Jordi Morató.
Posiblemente habían transcurrido casi veinte años desde que
coincidimos por última vez en algún acto en la empresa.
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